Según la propaganda que difundía Correos en 2016 en su portal web "CORREOS sigue avanzando en la prevención de riesgos laborales (PRL)
durante los primeros seis meses de 2016 y ha lanzado novedosas
iniciativas para lograr su objetivo de abordar la protección de la salud
de sus 50.000 empleados desde una perspectiva integral, que contemple
todos los aspectos relacionados con su bienestar físico, psíquico y
social".
El dato que usaba para demostrarlo es que "el número de accidentes laborales con baja en CORREOS se ha visto reducido en un 6,36%". Lo que no dice la empresa es que muchos accidentes laborales no son consideradas como tales por la mutua Muprespa y mucho menos se concede la baja a los compañeros que sufren innumerables problemas de salud por sus condiciones pésimas de trabajo.
Y no es de extrañar pues el principal servicio que ofrece Muprespa a Correos y en general a sus clientes empresarios es el "Plan de absentismo", es decir, evitar que haya bajas:
"Ponemos a su disposición nuestro Plan de Absentismo para ayudarle a
mejorar el ratio de las bajas de corta duración en su empresa. Se trata
de un novedoso y especifico plan con actuaciones concretas dependiendo
de su problemática y casuística."
En su documento "Iniciativas de mejora del absentismo (la suma perfecta)" Muprespa propone entre otras ideas perversas las siguientes:
- "Declaración enfática de la dirección de la empresa a los trabajadores sobre la importancia del absentismo"
- "Objetivos de absentismo a los mandos intermedios"
- "Seguimiento telefónico por parte de la empresa para la gestión de las ausencias bien concontact center o con llamadas desde el propio Departamento de RRHH"
- "Gestión de los listados de contrataciones eventuales valorando el cumplimiento laboral de los candidatos en contratos anteriores (lucha contra absentistas habituales)"
- "Referencias al absentismo en el convenio colectivo de la empresa."
- "Interesarse por el estado de salud de los trabajadores con enfermedades largas y graves. Aquí el papel de los servicios médicos es trascendental."
Para las empresas los trabajadores por defecto somos vagos y mentirosos. ¿Pero quién pone en marcha la producción y la economía desde la base? Los consejos de administración no son, evidentemente. "Piensa el ladrón que son todos de su condición".
Son muchos los compañeros que trabajan con tendinitis, esguinces y otras molestias musculares por no concedérseles la baja además de problemas psicológicos provocados por el estrés y la ansiedad fruto de la sobrecarga de trabajo y el acoso y derribo de los cargos intermedios sobre los trabajadores.
Especialmente criminal es el maltrato a los trabajadores eventuales que por miedo a no volver a trabajar y abandonados por las organizaciones sindicales HASTA AHORA presentes en Correos no se atreven a poner un límite al abuso al que son sometidos por la empresa. A compañeros jóvenes incluso se les ha causado enfermedades crónicas fruto de la ansiedad, por la que muchos de nosotros apenas duerme y pierde el apetito.
La respuesta de esas organizaciones sindicales es que el acoso es díficil de demostrar y conlleva acumular muchas pruebas. ¿Esperan estas organizaciones sindicales entonces que se produzca el daño para después poner la venda? ¿Se ponen entonces del lado de la justicia patronal en que por defecto los trabajadores mentimos? ¿Por qué no se le para los pies a la empresa y a sus esbirros cargos intermedios antes de que se le ponga un sólo dedo encima al trabajador sea fijo, funcionario o eventual?
La clave está en que esas organizaciones sindicales no hacen más que acatar las leyes que de por sí son perjudiciales y dañinas para los trabajadores, porque le da a la potestad a las empresas de actúar de antemano como juez y parte.
Y por otra parte esas organizaciones sindicales no promueven la organización (todos a una) de la plantilla, sino que la fragmenta en miles de afiliados atomizados e individualizados, resolviendo los problemas individualmente como gabinetes jurídicos en los que se han convertido.
La fuerza, y lo han demostrado los estibadores y otros muchos ejemplos gloriosos de la clase obrera, viene de la ORGANIZACIÓN, la unidad de acción y respuesta de todos los trabajadores independientemente de su tipo de contrato o de su función (atención al cliente, clasificación o reparto). Si todo el personal de
una unidad u oficina reacciona ante un mínimo intento de acoso a un
compañero, los latigueros de turno se lo pensarán más de dos veces antes
de tocar a cualquier trabajador. SI TOCAN A UNO, NOS TOCAN A TODOS.
Además hemos de tener objetivos claros y ambiciosos. Tener objetivos "realistas" y acomplejados no lleva más que a quedarse como estamos o peor, a no transformar la realidad, que es lo que necesitamos.
Desde la Coordinadora Sindical de Clase (CSC) creemos que los trabajadores por ser los principales productores de las riquezas de cualquier sociedad deberían tener las mejores atenciones y cuidados de salud y prevención posibles. Lo cual pasa por eliminar las mutuas privadas (que se lucran a costa de nuestra salud), acabar con el exceso de trabajo (plan de contratación estable) y garantizar un servicio público de salud con todas las mejoras y adelantos tecnológicos y científicos existentes y el suficiente personal sanitario para acabar con las esperas y los pasillos de los hospitales y centros de salud abarrotados.
Por el fin del acoso y el maltrato a los trabajadores de Correos
Por la ORGANIZACIÓN Y LA UNIDAD de los trabajadores de Correos
Por una Central Sindical Única
Afíliate a la Coordinadora Sindical de Clase (CSC)
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